jueves, 28 de febrero de 2013

corazón picante


Corazón picante, corazón ardiente ...
Para algunos son el alma del sabor y cada vez se atreven a más! Otros, no pueden ni verlo y otros apenas los vamos tolerando en el paladar. El chile picante (pimientos) se incluyen dentro de la gastronomía de muchas culturas y países y son los que ponen vida desde un “encender” hasta llegar al dolor en las salsas más picantes, tales como las que se ofrecen en México y la India.
Curiosamente, la ciencia ha demostrado que son un buen remedio contra la hipertensión arterial. Se ha demostrado que relajan los vasos sanguíneos y controlan la tensión arterial. Uno de los compuestos es la “capsaicina”, que da su picor pero que también activa un canal de las células en el interior de los vasos sanguíneos, donde se potencia la producción de monóxido de nitrógeno, una molécula gaseosa que protege a las arterias de la inflamación y otras disfunciones.

No lo tome a mal, pero “corazón picante” también es el nombre de uno de los productos que se ofrecen en las tiendas de sexo. Es un juego erótico con 100 pruebas de seducción, donde solo se puede controlar el inicio, lo demás será puro placer garantizado al incluir bebidas, sabores, frutas, aceites y pinturas, que terminarán dando un menú sensual comestible (eso dice la web eh!!).

Mientras se decide si cocinar o jugar, se dice que el chile reduce la secreción de ácido gástrico, el sangrado asociado al consumo de ciertos fármacos y que comer picante baja el riesgo de úlceras pépticas. Eso se lee en el internet. Siempre son temas tabú, que al final el picante a unos les endereza la carrocería gástrica intestinal y otros les funde el chunche.

Al asociar el chile picante y carne, de inmediato se remite a los anticuchos, receta del Perú, que son trocitos de corazón de res, adobados con aji, una de las variedades del chile picante. El corazón de res por sí mismo aporta vitamina B2, que ayuda a superar las migrañas, para la buena salud ocular y de la piel, mejora problemas nerviosos como el insomnio, la ansiedad o el estrés.
El chile panameño está entre la variedad de los (Capsicum chínense) como el habanero y aji. En Costa Rica también se produce y se usa entero dentro de las comidas, para resaltar el sabor. Si se raja o se rompe el resultado será mucho más picante. Leído, creído o no lo anterior, pues el resultado de combinar mi corazón y ponerlo picante ha dado este “corazón ardiente”, para pensar en cuanto beneficio le puede traer a su salud.
Requiere de 1 buen corazón, (el suyo y el de la res). Se lava bien con sal y limón. Se enjuaga y se pone a cocinar en olla de presión, en agua, sal, cebolla, chile dulce (mundial), 1 chile panameño entero, apio, orégano, ajos, tomillo, todas las hierbas aromáticas que tenga por ahí, sal y salsa inglesa. Se deja cocinar unos 45 minutos contado a partir del sonido de la válvula. En olla convencional le llevará 2 horas al menos. Aproveche y añada 2 plátanos verdes enteros, sin cáscara. Al tiempo se saca y se parte en trocitos. Reservar caldo, carne y plátanos por aparte.
Ahora prepárese una salsita de tomates. Cristalice cebolla picada, más chile dulce, tomillo y apio picado, añada 1 cucharadita de achiote, 1 taza de salsa de tomate tipo “ranchera”, cucharadita de azúcar, 1 chile panameño entero y 2 tazas del caldo. Tape y deje que hierva por unos 10 minutos para que se condense un poco. Al tiempo añada la carne picada y los plátanos en rodajas. Baje el calor y deje otros 10 minutos más.
Antes de servir añada un poquito de culantro picado. Puede servir en tazas pequeñas como “boquita” o bien acompañar de un arroz blanco o puré de papas.
Que arda su corazón, que se encienda el espíritu, que la pasión le lleve a enrojecer la piel, a ponerle vida y sazón al arte de comer y amar.

2 comentarios:

Cocco dijo...

Luis, pero que post tan ardiente y tierno a la vez! Me has sacado los colores con el juego xD

Un abrazo de corazón Caribe

González Luis dijo...

Cocco... muy especial de tu parte en leerlo y dejarme tu comentario.
Un abrazo hasta estrechar tu corazón. Saludos.